...la esperanza prevalece
lunes, 31 de mayo de 2010
La esperanza prevalece...
A veces la vida puede darte una puñetada en la cara mas fuerte y más cruda que la muerte...
sábado, 29 de mayo de 2010
Blackbird
Hace algunas semanas cuando latía todavía su corazón en mi seno entré a mi salón de clases. La parte de atrás es una inmensa pared de cristal. En el quicio de esa ventana había una paloma muerta, miré entonces el cristal y pude ver la huella indeleble del golpe fatal.
Pensé entonces en los posibles agüeros, pero nunca en lo que acabaría ocurriendo.
Ahora creo que no mucho después tu corazón latió por última vez.
Hace dos días afuera de mi casa amaneció una paloma muerta. Pensé entonces que eres tú ese pájaro esquivo que me ha dejado con las alas rotas.
Ayer descubrí un pájaro anidado en el más imposible de los resquicios: entre las rendijas de la ventana del baño de maestras de la universidad. Esa es la imagen que corona este post.
Ayer Paul McCartney tocó en la ciudad de México y yo no pude estar ahí. De haber estado tal vez un buen amigo y yo habríamos llorado por las aves que nos han dejado mientras Paul entonara aquello de:
"Blackbird singing in the dead of night
Take these broken wings and learn to fly
All your life
You were only waiting for this moment to arise..."
viernes, 28 de mayo de 2010
Tengo miedo
El mundo me saluda como si nada hubiera sucedido.
Como si ese velo negro de papel de arroz no me distinguiera
como a tantas otras personas a pesar de que andamos por el mundo
de los como si nada...
Tengo miedo que el mundo te convierta en mentira
que niegue tu ausencia.
A mí no se me olvida el dolor de tu llegada/partida
el horror de verte minúsculo en la palma de mi mano.
Ya no necesito llorar todos los días
pero no quiero vivir como quieren los demás
como si hubieras sido sólo un simulacro.
No me lastima que me recuerden que hubo algo vivo dentro
y quiero gritar desgañitadamente que he sido féretro
de alguna manera a todos les mortifica aceptarlo:
que anduve muchos días (ingenua) cargando la muerte en mi seno.
Como si ese velo negro de papel de arroz no me distinguiera
como a tantas otras personas a pesar de que andamos por el mundo
de los como si nada...
Tengo miedo que el mundo te convierta en mentira
que niegue tu ausencia.
A mí no se me olvida el dolor de tu llegada/partida
el horror de verte minúsculo en la palma de mi mano.
Ya no necesito llorar todos los días
pero no quiero vivir como quieren los demás
como si hubieras sido sólo un simulacro.
No me lastima que me recuerden que hubo algo vivo dentro
y quiero gritar desgañitadamente que he sido féretro
de alguna manera a todos les mortifica aceptarlo:
que anduve muchos días (ingenua) cargando la muerte en mi seno.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)